La poesía ese primer
territorio libre de la palabra
sus armas no son más
que la ternura y la lucidez
del hombre que la esgrime
como una espada o una caricia.
La poesía camina a pie
por la ciudad en la forma
de una mujer de falda roja o senos divinos
en las palomas blancas o grises
que revolotean sobre las estatuas heroicas
en los árboles de flores moradas
o amarillas que caen contra
el piso como hojarasca.
La poesía es la patria
de la lengua que escribes y hablas
y de la tierra que amas y cantas
son las mujeres desnudas de Botero
las mariposas amarillas de Macondo
el verde de todos los colores de Aurelio Arturo
el movimiento de caderas en árabe de Shakira
la travesía de Maqroll el Gaviero de Mutis
la rebelión de Joe Arroyo
las barracudas de Obregón
la casa en el aire de Escalona
el escorpión de Higuita
el mar de siete colores de San Andrés
la tierra del olvido de Vives
el río de colores Caño Cristales
en la Sierra de la Macarena
las negras palenqueras de Cartagena
el canto de flauta de millo
de los gaiteros de San jacinto
y la vorágine de Arturo Cova de Rivera
los que definen el rostro
imborrable de la poesía.